Una de las ventajas de no haberme dejado caer por aquí en tantos meses es que gran parte del tiempo que no he dedicado al blog lo he podido dedicar a leer.
Como siempre ha habido de todo: libros que me han encantado y otros que no tanto, lecturas más ligeras, literatura de la buena y algún bodrio que no he podido ni terminar. Y haciendo repaso de mis lecturas me he dado cuenta de que he leído bastantes memorias.
La verdad es que no pensaba yo que fuera especialmente fan de este género, pero está claro que sí lo soy. No sé si por casualidad o porque inconscientemente he buscado este tipo de libros, pero el caso es que he leído unos cuantos y hay varios que me han gustado mucho.
Son historias a ratos crudas, divertidas, dramáticas y tiernas en las que muchas veces la realidad supera claramente la ficción. Y aunque los libros que te presento son muy diferentes entre sí, todos tienen algo en común: ninguno te dejará indiferente.
Como siempre ha habido de todo: libros que me han encantado y otros que no tanto, lecturas más ligeras, literatura de la buena y algún bodrio que no he podido ni terminar. Y haciendo repaso de mis lecturas me he dado cuenta de que he leído bastantes memorias.
La verdad es que no pensaba yo que fuera especialmente fan de este género, pero está claro que sí lo soy. No sé si por casualidad o porque inconscientemente he buscado este tipo de libros, pero el caso es que he leído unos cuantos y hay varios que me han gustado mucho.
Son historias a ratos crudas, divertidas, dramáticas y tiernas en las que muchas veces la realidad supera claramente la ficción. Y aunque los libros que te presento son muy diferentes entre sí, todos tienen algo en común: ninguno te dejará indiferente.